Rusia eliminó a España de la mano de Igor Akinfeev
Tras 120 minutos de adrenalina y escases de juego, el local se mete entre los ochos mejores de la copa mundial a través de la definición por penales. El arquero fue clave en dos atajadas que significaron la clasificación. Ahora el rival será la selección croata o Dinamarca.
En el desarrollo de la primera parte España supo implementar el manejo de balón en varios tramos del encuentro. Con cierta incertidumbre a la hora de concretar los avances, el equipo de Fernando Hierro complementó el dominio colectivo y a los once minutos un tiro libre le otorgó la apertura del marcador tras una marca deficiente de Sergei Ignasevich sobre Sergio Ramos que determinó el gol en propia puerta del central.
Ya con la diferencia en el resultado la selección española manejó los hilos del partido y mediante una excesiva proyección con pelota a su favor, el andar colectivo fue variando para dar lugar a una reacción discontinua de Rusia que ante sus defectos en el juego pudo adelantarse en la cancha y alternar lo que era una exhibición del rival.
El desenlace del primer tiempo mostró ciertas dificultades de España al momento de determinar sus intenciones y de allí, el dueño de casa encontró una alternativa de llevar peligro al arco de De Gea. A cinco de concluir las acciones, Gerard Pique interfirió con su brazo el cabezazo de Ignashevich en el área y Kiupers marcó el punto desde los doce pasos. Artem Dzyuba se paró delante del esférico y con sutileza cambió el trayecto elegido por el arquero para igualar el encuentro.
De un error visible y grotesco el seleccionado español minimizaba lo realizado en los minutos anteriores donde el rival no había incomodado al sistema defensivo. Sobre los minutos de descuento, Nacho diagramó un pase entre líneas a espaldas de la defensa y Diego Costa no pudo vencer la posición de Igor Akinfeev que achicó el espacio y dio el pie al final de la parte inicial.
La parte complementaria tuvo a España con posesión absoluta y a Rusia con una clara idea de replegarse en campo propio priorizando la obstaculización de las envestidas rivales que se preveían al campo de los cuarenta y cinco minutos. El nivel del conjunto dirigido por Hierro no alternó y ese factor fue decisivo para que el encuentro no cuente con aproximaciones netas hacia los arcos.
Sobre el final y con la presencia de Andrés Iniesta el equipo europeo supo abrir algunos espacios ocupados por la defensa rival y el volante de Barcelona protagonizó un disparo que el arquero contrario despejó y en el rebote Aspas no pudo conectar con eficacia la situación. Así, el seleccionado ruso logró llevar el partido al alague con un desempeño físico notable.
Los primeros quince minutos del complemento ratificaron el dominio de balón español que con el correr de las jugadas disminuyó el andar y la precisión en los metros finales de la ofensiva. Los sustituyentes no variaron su ventaja en lo físico y eso mantuvo la paridad hacia el tiempo final.
El lapso culminante de la prórroga también mostró a España con iniciativas de coronar el partido pero algunas determinaciones en el ataque y la firmeza rusa en defensa contrarrestaron los ingresos continuos a la zona de definición. En una última insistencia Rodrigo ejecutó una jugada individual y al entrar al área buscó el palo opuesto del arquero que resolvió la acción con la mano derecha. Solo restaron minutos para dirigirse a la tanda de penales.
Desde los doce pasos, Akinfeev se lució y tras parar el tiro de Koke y Aspas, Rusia accedió a los cuartos de final del Mundial en donde se medirá con Croacia o Dinamarca.